Ayer tuve una tarde de lo más interesante charlando con dos profesionales de la educación. Uno es un director de un colegio de infantil y primaria. El otro es un profesor de universidad que, tras muchos años de docencia en Matemáticas en otros estudios, ha empezado este año a dar clase en una escuela de Magisterio.
Uno de los puntos en los que no se pusieron de acuerdo fue sobre los ratios y me dejaron con la mosca detrás de la oreja.
Hace mucho tiempo que las políticas educativas se han orientado a reducir el número de alumnos por profesor. Desde nuestros 40 ó 45 niños en cada clase allá por 1980 a los 25 de ahora hay un verdadero abismo. Todo padre comenta como información importante sobre el cole al que asiste su hijo cuántos niños hay en clase y confía en que es mejor la clase más pequeña que la más grande. ¿Cómo puede ser que alguien cuestione si esto es cierto? ¿No es obvio que, a menos niños por profesor, mejor es la atención y el aprendizaje? He estado echando un vistazo a la red esta mañana y he encontrado gran cantidad de estudios que demuestran que sí, que es importante disminuir los ratios. Casi tantos como los que demuestran que no es un factor determinante. O que sólo en una medida muy pequeña.
Uno de los estudios que más me ha gustado aunque es un poco antiguo (1999) está publicado por el departamento de educación de EEUU. Las conclusiones que sacan después de revisar los estudios realizados en varios estados son las siguientes:
1) Parece haber consenso en las investigaciones que muestran que la reducción del tamaño de las clases en los primeros cursos (hasta tercero de primaria) llevan a un mayor rendimiento de los alumnos. Los investigadores tienen más reservas sobre los efectos positivos entre los 10 y los 18 años.
2) Los efectos positivos de esta reducción en el rendimiento académico aparecen cuando el tamaño de la clase se reduce a 15 ó 20 estudiantes, y continúa mejorando conforme se acerca a la tutoría uno a uno.
3) Los datos indican que si se reduce desde una cifra muy por encima de los 20 estudiantes, a menos de 20, se mueve el resultado académico de un alumno medio (percentil 50) a un percentil 60. Los efectos son mayores para los alumnos de minorías desfavorecidas.
4) Los estudiantes, los profesores y los padres afirman que la reducción del número de alumnos mejora la calidad de la actividad en clase .
A menos que mis colegas quieran seguir su discusión aquí en el blog y puntualizar cada uno su postura (sé que ambos pasan por aquí de vez en cuando), dejadme que haga mi resumencillo:
- Desde el punto de vista de educación infantil y principio de la primaria, le damos un punto al defensor de bajar los ratios (el director de colegio, como os imaginabais ya). A partir de esa edad, le damos un punto al profe de universidad. Igual por eso no se ponían de acuerdo ;)
- El salto abismal que se ha dado de 40 alumnos a 25 no habría resultado un gran éxito en el sistema educativo español porque aún no se ha llegado a la cifra mágica de los 15-20. Dejadme que haga mis cuentecillas... si tomo que en Infantil y Primaria hay casi 4 millones de niños en España, me sale que un ratio de 25 se consigue con 160.000 profesores (sin tener en cuenta cargos directivos, liberados sindicales, profesores de apoyo, especialistas y un largo etcétera que incrementa esas cifras en la realidad). Para bajar a los 20 niños por clase, me sale que hay que tener un 25% más de profesorado (!!!) y para bajar a los 15 niños por clase, habría que aumentar en un 66% la dotación de profesores. Aunque no es fácil navegar por las cifras de gasto en Educación, me sale que con a partir de unos 5.000 millones de Euros podríamos llegar a los 20 niños por clase con los que ya notaríamos el efecto positivo. Esa cifra es la que hoy Grecia necesita para reducir el déficit. Es el total del PlanE de Octubre de 2009... y es el total del gasto anual de los alemanes en el cuidado de sus perros (echad un vistazo en google si este dato os parece increíble.)
- La ganancia cuando se llega a los mágicos 20 alumnos es de 10 puntos porcentuales. La pregunta es ¿cuántos puntos porcentuales puede subir el rendimiento académico de los alumnos de infantil y primaria si se invierten 5000 millones de euros en formación del profesorado? ¿y si se invierten en atención a la diversidad? ¿y se invierten en mesas de color rosa? ¿o azul? Sabiendo que el presupuesto es de 5000 millones de euros, ¿qué acción es la más rentable académicamente hablando?
- El cuarto punto, el de la satisfacción del personal, quizás es el que más me convence para votar por la bajada de los ratios, porque si los padres están contentos, si los niños están contentos y si el profe está contento, el caldo de cultivo para una educación de calidad ya está servido. Digan los estudios misa.
PD. Aunque me han dicho que deje de poner el acento a la "o" cuando separa números, me resistiré al cambio tanto como pueda y cualquier día de estos me haré del grupo "Me niego a que 'i griega' pase a llamarse 'ye'" que hay facebook ;)
Este es realmente uno de los temas más controvertidos (y hay muchos). Soy un poco menos radical de lo que me pinta el blog. Por supuesto, reducir la ratio tiene efectos positivos incontestables. La cuestión es si es el factor más importante del rendimiento. Dicho de otra forma, una vez alcanzada una ratio razonble (y ya sé que definir eso es un problema en sí mismo, digamos 20-25 niños en primaria), si queremos invertir más recursos en el sistema, ¿hay alternativas mejores a bajar la ratio? La pregunta es difícil, y no conozco estudios ni medio concluyentes, pero creo que hay dos opciones que al menos habría que considerar:
ResponderEliminar- invertir más dinero en selección y formación del profesorado. Aquí sí soy radical: estoy convencido de que los resultados de un buen profesor que trabaja con 30 niños son siempre mejores que los resultados de dos profesores mediocres que trabajan cada uno con 15 niños y, si me apuráis, con los resultados de 30 profesores mediocres que trabajen con un niño cada uno.
- invertir en profesorado que permita hacer actividades de apoyo, durante unas pocas horas a la semana, tanto para niños con problemas de apredizaje, como para niños que demanden contenidos adicionales.
Que conste que yo no había destapado tu identidad, ¿eh? ;) Y que no creo haberte pintado radical... aunque eso de los 30 profesores mediocres en un ratio 1-1 te retrata bastante, jeje.
ResponderEliminarEstoy contigo en que la formación del profesorado es uno de los ejes fundamentales y por eso te apoyo totalmente en tus esfuerzos por dar mucha importancia a tus clases en Magisterio. Y por eso el año pasado también yo me apunté a dar clase en el Máster de Secundaria. No creo que podamos seguir quejándonos de la formación del profesorado sin hacer todo lo que esté en nuestras manos para intentar ayudar.
Respecto a las actividades de apoyo que dices, no deja de ser lo que comentaba Esther hace unos cuantos post sobre la segregación. Políticamente incorrecta, pero exitosa allá donde se practica, respetar los ritmos de aprendizaje de cada niño obliga a segregar por ritmos en ciertos momentos. Sería ideal que un profesor pudiera respetar los 25 ritmos de sus 25 niños pero, como eso es prácticamente imposible, lo único que parece funcionar en la práctica es hacer agrupaciones por ritmos. Sigo teniendo pendiente una entrada sobre este tema tan espinoso.
Yo sólo responderé al dato para el que me veo capacitado aportar una opinión: el de los perros.
ResponderEliminarAsumiendo un gasto promedio de 50 euros mensuales por cada perro, incluyendo alimento, juguetes, chuches, vacunas, etc., da como lugar 600 euros anuales/can
Así que nada, 5000 millones en un año / 600 euros sería un gasto para cubrir unos 8'333 millones de chuchos en el país germano.
Vía Wikipedia (http://es.wikipedia.org/wiki/Alemania#Demograf.C3.ADa) se dice que cada madre germana tiene una media de 1.39 hijos, con lo que asumiremos que una "familia" está formada por padre + madre + 1.39 hijos = 3.39 personas dentro de la familia. Están jodidos estos Alemanes para pagar las pensiones dentro de un par de décadas.
Sea como fuere y teniendo en cuenta que la población en Alemania es de unos 82 millones de personas (también vía Wikipedia http://es.wikipedia.org/wiki/Alemania), asumiremos que existen 82 millones / 3.39 = 24'18 millones de familias en Alemania. obviando solterías, párrocos y demás que, entiendo, es un porcentaje menor y poco representativo.
Tenemos dos datos:
- 8.33 millones de chuchos en Alemania según la hipótesis de gasto de 50eur por chucho/mes y esos 5.000 millones de gasto total anual.
- 24.18 millones de familias en Alemania.
CONCLUSIÓN PRIMERA: casi 1 de cada 3 familias en Alemania tiene perro. Si alguien piensa que esa cifra es abultada tengo una respuesta: esos 50 euros perro/mes es un coste que me ha venido a la cabeza tras pensar un rango de precios inferior y superior EN ESPAÑA.
- Rango inferior: comprar pienso en el Mercadona o en el Carrefour, obviar algunas vacunas no obligatorias, minimizar chorradas, etc.
- Rango superior: comprar pienso de gama alta, buenas chuches, juguetes, etc.
(De veras, la diferencia de precios entre darle buen alimento al chuche y darle lo-primero-que-encuentres es abismal.)
Y claro, son 50 euros de media... EN ESPAÑA. Es probable que EN ALEMANIA el precio total del "mantenimiento" del chucho sea notablemente mayor por la simple lógica de que allí todo menos la cerveza es más caro.
CONCLUSIÓN SEGUNDA: el dinero se va volando.
Una lectura adicional sobre el coste de un perro en España, en 2007:
Eliminarhttp://www.consumer.es/web/es/economia_domestica/sociedad-y-consumo/2007/05/24/162986.php
No da un total concreto (lo siento pero no me apetece ponerme a buscar cada cifra y sumar a las 2.30 de la mañana) pero sí varios pequeños subtotales, que así a groso modo dan una cifra bastante, bastante superior de los 50 euros/mes indicados en el comentario anterior. Así que quizá me haya pasado con el ahorro.